miércoles, 16 de marzo de 2011

Día ciento trece: ¡Los bricks van al plástico!


Debe ser que me hago mayor y me vuelvo más tiquismiquis. O que llevo tantos años separando la basura en casa para reciclar, que me sorprendo cuando alguien más joven que yo desconoce los materiales que debe depositar en cada contenedor.

Cuando llegó mi nuevo compañero de piso en septiembre, de tan sólo 18 años, me llamó mucho la atención que no tuviera ni idea de cómo reciclar en casa. A veces me pasa como a la hermana de mi amiga Laura, y me pregunto si soy yo la única persona que ve la realidad así, porque estaba convencida de que ya era algo habitual en todas las casas del país eso de separar los residuos.

Cuando la otra realidad golpeó mi cara, lejos de sentir desasosiego, vi en el mozo un diamante en bruto al que poder educar en el respeto por el medio ambiente para que, cuando ya no estuviese conmigo, pudiera a su vez concienciar a otros, y así sucesivamente. Una vez más, mi realidad personal me engañó vilmente.

Seis meses después sigo sufriendo convulsiones cada vez que voy a tirar algo al cartón y me encuentro allí un tetra-brick de leche o zumo (o una lata de cerveza con el vidrio, o unos apuntes sucios en el cubo amarillo).

El tema de la separación de basuras es algo que requiere tan poco esfuerzo, que no soy capaz de entender por qué la gente no se conciencia de una vez y lo empieza a hacer en sus casas.

De vez en cuando me sale el típico (o típica) listo/a, que me comenta que es mejor no separar nada, para poder dar trabajo a otros que se encarguen de esa tarea en alguna planta separadora. En primer lugar, si los municipios cuentan ya con contenedores especiales para cada tipo de residuo, no tiene sentido pensar que los que se depositan en los contenedores normales vayan a pasar por un segundo proceso de separación por si algún despistado ha echado algo que no debería. Todo lo que tiramos a los contenedores normales va a parar a los vertederos. En segundo lugar, me gustaría saber si esa persona que tan caritativamente vela por el trabajo de los demás preferiría trabajar separando la basura maloliente de otros a trabajar en la recogida de los residuos ya separados.

Pero claro, cuando se trata de poner excusas, cualquiera vale: "es que no tengo sitio para tanto cubo", "es que tener que ir hasta los contenedores de reciclar, con lo lejos que están...". Es que el que no recicla es porque no le da la gana y punto.

En fin, que volviendo al título de la entrada, los bricks van al contenedor amarillo, porque aunque por fuera se ven de cartón, llevan aluminio y plástico. Los vasos y las bombillas NO se reciclan con el vidrio (de hecho, las bombillas de bajo consumo y los fluorescentes tienen sus propios contenedores en determinados establecimientos). Y nunca, nunca, nunca, tirésis las pilas con la basura de casa, por dios bendito!

Para saber más sobre los reciclados de los brick aquí.

Página recomendada hoy: Ecoembes.

Un cordial saludo,

La clienta recicladora.

4 comentarios:

  1. He aprendido que las bombillas no van al vidrio.... Realmente nunca he sabido dónde va una bombilla XD En ese sentido me ha encantado la entrada, muy pedagógica... Lo que no me parece justo es que os cebéis con los pobres, jóvenes y apuestos compañeros de piso, que lejos de ser una figura del fitness: http://reinventandolasganasdecuidarse.blogspot.com/2011/02/es-facil-cambiar-de-habitos.html
    o de ser el Ministro de Medioambiente, tengamos que ser sometidos a esta humillación social. Tenemos nuestros derechos! Necesitamos una asociación de estudiantes inmaduros, YA!

    :) !!

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  2. jajajajaja ánimo, q hasta junio te queda tiempo con el compañero!!
    tampoco es tan complicado no? Creo q habia hace no mucho un anuncio sobre lo q era cristal y lo q no bastante gracioso pero el mensaje te lo colaba.
    Aunque en algunos sitios no te creas q es fácil eh? En el pueblo de mi padre no hay contenedor amarillo y todo va al verde, asiq sufridos trabajadores de las plantas de basuras de salamanca tienen mas trabajo

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  3. ¡Que no me cebo con nadie! Sólo reniego aquí para desahogarme un poco... :D

    Seguiré luchando para que antes de junio no tengamos estos problemas de dislexia recicladora.

    elmundodesdelaventana, entiendo que cuando no hay contendedores de reciclaje, no se puede hacer gran cosa, pero afortunadamente cada vez hay menos municipios, por pequeños que sean, que no los tengan. Y si no, siempre podemos usar los residuos para hacer manualidades... :D

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  4. Estoy en Valencia de intercambio por unos meses.
    Yo en casa (México) no tengo contenedores en mi pueblo (vamos, ni siquiera en todas las ciudades los hay), pero igual separo y llevo a los distintos lados los materiales que se deba, aunque me quede lejos el recoclaje. Y no me parece que el hecho de que allá no haya contenedores sea un pretexto para no separar residuos.
    Pero lo que no deja de sorprenderme como acá lo tienen tan fácil y aún así la gente no hace lo que debe. Que pena.

    ¡Saludos!

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